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Balletcore, la aesthetic de 2022
24 de mayo de 2022
@Kroom2
A través del siglo XX, el ballet ha sido una gran inspiración en la moda y viceversa. El ballet surgió como una forma de arte para las elites al principio de los 1900 o los 1930s, aunque en realidad nace en el Renacimiento Italiano del siglo XV. Su estética asociada a la aristocracia sigue vigente hasta hoy en día. Por ejemplo, cuando hacen alguna postura referente a una venia (una señal de respeto hacia la monarquía). El rey Luis XVI moldeó el ballet en 1661 con la apertura de la Academia de la Danza con el propósito de entrenar bailarines para entretener a su corte.
En su época fue un arte dominado por los hombres que también suplantaban el papel de las mujeres. No fue asociado a la feminidad hasta 1830, debido a muchas causas, por ejemplo, la privatización del ballet, la invención del calzado en punta, los temas románticos, etc. Al punto que los críticos pensaban que el ballet masculino era degradante. Al ballet también se lo asociaba con la prostitución femenina.
Durante el siglo 19 se dieron algunos cambios de vestuario, en 1932 se usaron por primera vez los tutús, así como las primeras zapatillas de ballet terminadas en punta. No fue hasta comienzos del siglo XX que el ballet tuvo una mejor reputación asociada a la clase alta. Se lo asocia con el “descubrimiento del cuerpo humano” durante la moda del ejercicio físico. Como consecuencia el bailarín masculino regresó con la representación de buena salud.
En un principio era una fuente de inspiración para los diseñadores de moda. La compañía con más influencia en esa época era Ballet Russes en el siglo XX debido a sus colaboraciones con artistas, compositores, pintores como Picasso y Matisse, diseñadores como Coco Chanel y Paul Poiret. Se dice que esta compañía exportó una fantasía rusa a la audiencia europea.
La influencia del ballet en la moda continuó en los años 30. Si bien el color rosa es el más asociado al ballet. Chanel se inspiró en un vestido Christian Berard, asimismo, la producción de La Bella Durmiente utilizó otras tonalidades de azul y lila que fue algo innovador para la época. Schiaparelli utilizó el azul de esa producción para su colección. Diseñadores como Balenciaga y Dior también sacaron inspiración de esto en sus vestidos (Dior utilizaba mucho el tul). Y sin ir más lejos Valentino sacó una colección de vestidos en 2014 también inspirado en el ballet. También Marchesa en 2016 y Erdem en 2021. Se podría decir que cualquier vestido con tul está inspirado en el ballet.
El balletcore es muy diferente. Existen dos clases de moda inspirada en ballet. El primero inspirada en un estilo más romántico (el de Marie Taglioni) y el otro inspirado por el atuendo que se usa en los ensayos, algo más casual. Las adeptas a esta tendencia se inclinan hacia la segunda por ser más práctica y económica.
Lo más visto en este estilo son las polainas, medias, leggins, bodys, lazos para el pelo, vestidos lenceros, orejeras de peluche, zapatos de ballet, botas UGGS, perlas, cascos (si es una tendencia), perfumes florales como el Miss Dior, y sobre todo los colores, rosa, piel, blanco y negro.
Tiene algo que ver con la aesthetic coquette, que es algo controversial por romantizar la transición de niña a mujer, que tiene sentido por la relación entre el ballet y la feminidad representada en la cultura pop con las películas de Barbie.
Las inspiraciones para este aesthetic incluyen la película El Cisne Negro, Lily, Rose Depp, Elle Fanning, Audrey Hepburn, Dior, Miu Miu, Blumarine, etc.
Los leotardos han sido usados por gimnasta y artistas de el circo. En un principio eran de algodón por lo que no se veían tan bien. Eso hasta los años 60 cuando se presentó la licra al mercado. Desde los años 70 fue un importante material para las personas que practicaban baile. Hoy en día se utilizan los bodies hechos de este material, famoso en este asthetic.
La bailarina Anna Pavlova fue la que introdujo las bailarinas, como tenía los arcos muy inestables por lo que encargo al zapatero de la Opera Metropolitana de Nueva York, Salvador Capezio, pero fue hasta 1941 que se empezó a vender en Neiman Marcus. Audrey Hepburn, Brigitte Bardot, Jean Seberg popularizaron este calzado en los 50s y 60s.
Es una evolución del athleisure. Queremos estar cómodos si vestimos leggins, jerseys, corses, etc. Estar bien vestidos, pero tampoco sobrecargado, así es el Balletcore, la aesthetic de 2022. También revive tendencias, los básicos elevados, piensa en un top, pero con agujeros como los vestidos de Mugler en los 90s.
Pero esta aesthetic también tiene sus puntos en contra, por ejemplo, está asociado a la hiper femineidad (el ballet es arte, es más que tutús y rosa como lo hacen ver algunos usuarios en Tik Tok y Pinterest) y a trastornos alimenticios. Quien participe en esta aethetic debe tomar en cuenta las retóricas que conlleva.
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